viernes, 8 de febrero de 2008

Jubilarse y Vivir

En ocasiones, pienso que a las personas mayores, por regla general nos cuesta emprender proyectos a largo plazo. Será que inconsientemente, estamos fijando plazo a nuestra existencia, y consideramos que no vale la pena iniciar algo, que posiblemente, no podamos terminar.


Por descontado hay personas que a lo largo de su vida han sido emprededoras, y al llegar a la vejez lo siguen siendo, pero aún son las menos. En nuestra vida cotidiana buscamos excusas para todo, nos atrae la vida fácil sin complicaciones, es corriente ver personas que se dan por vencidas antes de intentarlo. Por suerte, de un tiempo hacia aquí, esta forma de interpretar la vida está en retroceso: los mayores se cuidan más, consideramos normal verlos en sitios que años atrás eran impensables, efectuan actividades físicas y mentales, como baile e informática entre otras. Éstas y muchas otras han dado un nuevo significado a su existencia.

Un paso muy importante ha sido la creación de las Asociaciones de Jubilados y Pensionistas, donde pueden realizar dichas actividades y muchas más, o practicar el voluntariado, ayudando a los demás en un ambiente propio a nuestra edad, para ello sólo falta conservar el deseo de seguir viviendo en plenitud, y considerarnos necesarios. Aún recuerdo antaño, los grupos de ancianos deambulando por los jardines, sin otra cosa que hacer, que contarse sus recuerdos, o bien sentados en las escaleras del metro, para estar más calientes. Celebremos que esto haya pasado a mejor vida.

Por suerte, esta nueva manera de entender la vida va tomando cuerpo y cada día somos más los que creemos que concluída nuestra etapa en activo -a nivel laboral- nos quedan aún muchos años para disfrutarla plenamente y ser útiles a la sociedad.